El infectólogo y profesor de la Escuela de Medicina, de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), doctor Clemente Terrero, dictó la conferencia titulada “La Rabia en República Dominicana, acciones para la Prevención”, en la que abordó con propiedad distintos aspectos clínicos y terapéuticos de esa enfermedad.

El doctor Clemente Terrero en momentos en que dicta su conferencia en el auditorio Manuel del
Cabral.

La actividad fue presidida por Rosel Fernández, decana de la Facultad de Ciencias de la Salud; Ruth Agüero, directora de la Escuela de Salud Pública, unidad académica que organizó el evento; Alma Bobadilla, en representación del Colegio Médico Dominicano (CMD); y Patricia Reyna, directora de la Escuela de Capacitación y Perfeccionamiento Docente.

          La maestra Rosel Fernández, al centro, junto a integrantes de la mesa de honor.

Al dar la bienvenida a los presentes, la maestra Agüero señaló que la oferta de la conferencia, sobre un tema de interés colectivo como el de la rabia, se debe al compromiso social que asume la UASD con el pueblo dominicano, ocasión que también aprovechó para exhortar a los dueños de mascotas a ser responsables en relación al cuidado de éstas.

En tanto que, la decana destacó la labor educativa que lleva a cabo la Escuela de Salud Pública, formando a los futuros profesionales de la salud con las competencias necesarias en el manejo de distintas enfermedades; de igual forma, valoró el trabajo preventivo que realiza el doctor Terrero, ofreciendo charlas y conferencias a nivel nacional.

Datos a destacar de la conferencia

En su exposición, el doctor Terrero señaló que la palabra rabia deriva de la antigua raíz india “rabh”, que significa conducta violenta. Aclaró que la rabia es una enfermedad de los animales (perro, gato, murciélago, hurón…), quienes al agredir a seres humanos pueden transmitírsela, al tiempo que resaltó que la misma tiene una letalidad del cien por ciento de los casos.

Entre los síntomas que dijo puede presentar un perro con rabia figuran: desorientación, sialorrea (producción excesiva de saliva), aislamiento, rechazo a los alimentos, agresividad y cola caída.

En el humano se llega a un estado de coma, que puede ser inducido para aplicar el tratamiento correspondiente, se produce perdida de la conciencia y aumento de la presión intracraneal.

 El auditorio Manuel del Cabral se puede observar completamente repleto de público, en su mayoría estudiantes de las
 distintas carreras de la Facultad de Ciencias de la Salud.

El galeno realizó un recorrido por el devenir histórico de la enfermedad, destacando que la rabia ya era conocida desde la antigüedad, miles de años antes de nuestra era, siendo probablemente más antigua que la raza humana.

Informó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima en 59,000 las muertes anuales producidas por la rabia, la mayoría de la cuales ocurren en zonas rurales de países en desarrollo, y que gracias a la vacunación postexposición se previenen 327,000 muertes al año en el mundo.

En el 2018 se reportaron cuatro casos de rabia en el país, todos con desenlaces fatales, los cuales correspondieron a una niña de cinco años de edad; dos niños, uno de 5 y otro de seis años, y una señora de 54 años, varios de ellos procedentes de Pedernales, donde se denunció la existencia de un brote de la enfermedad.

A la actividad, que tuvo lugar en el Auditorio Manuel del Cabral, de la Biblioteca Pedro Mir, asistieron docentes y estudiantes tanto de la UASD como de otras universidades.

Ultima actualización (Jueves 14 de Marzo de 2019 10:18)